Como hacer un flan

It’s a cozy Sunday afternoon, and the smell of vanilla and caramel is wafting through the kitchen as you aim to impress your family with a classic dessert: flan. You’ve seen mouth-watering pictures online and can’t help but wonder, what’s the secret to creating this silky, custard-like treat? Perhaps you’ve never made flan before or maybe you’ve had a few failed attempts that left you feeling defeated. Either way, you’re determined to master this delicious dish and bring a sweet touch to your table.

Para hacer un flan, necesitarás huevos, leche condensada, leche evaporada, azúcar y vainilla. Mezcla todos los ingredientes, carameliza el azúcar y hornea a baño maría durante aproximadamente una hora.

Para hacer un flan perfecto, sigue estos pasos detallados:

1. Ingredientes: Reúne todos los ingredientes que necesitarás. Esto incluye 4 huevos, 1 lata de leche condensada (aproximadamente 397 g), 1 lata de leche evaporada (aproximadamente 360 ml), 1 taza de azúcar para el caramelo y 1 cucharadita de extracto de vainilla.

2. Preparar el caramelo: En una cacerola a fuego medio, agrega la taza de azúcar. Revuelve constantemente hasta que se funda y adquiera un color dorado, dejando de lado el fuego antes de que se queme. Luego, vierte el caramelo calientito en un molde para flan, cubriendo el fondo de manera uniforme.

3. Mezclar los ingredientes: En un tazón grande, bate los huevos y agrega la leche condensada, la leche evaporada y el extracto de vainilla. Mezcla bien hasta que todo esté combinado de forma homogénea.

4. Hornear: Vierte la mezcla sobre el caramelo en el molde y coloca este último dentro de una bandeja grande. Llena la bandeja con agua caliente hasta aproximadamente la mitad del molde para cocinar al baño maría. Hornea en un horno precalentado a 180°C (350°F) por aproximadamente 50-60 minutos, o hasta que al insertar un cuchillo en el centro, este salga limpio.

5. Enfriar y desmoldar: Una vez que el flan esté cocido, retíralo del horno y deja que se enfríe a temperatura ambiente. Luego, refrigéralo durante al menos 4 horas o toda la noche. Para servir, pasa un cuchillo por los bordes del molde y voltea sobre un plato. ¡Disfruta de tu delicioso flan!