Como hacer alitas de pollo al horno

¿Alguna vez te has encontrado con antojo de un delicioso platillo que sea fácil de preparar y perfecto para compartir con amigos o familiares? Una tarde de fin de semana, después de regresar de un largo día de trabajo o quizás durante una reunión casual en casa, las alitas de pollo al horno pueden ser la opción perfecta para satisfacer ese deseo. Sin complicaciones y con sabores irresistibles, este plato se adapta a cualquier ocasión, desde una cena informal hasta una celebración deportiva. Así que, si te preguntas cómo hacer alitas de pollo al horno de forma sencilla y sabrosa, has llegado al lugar indicado.

Para hacer alitas de pollo al horno, primero precalienta el horno a 200 °C (400 °F). Luego, mezcla aceite de oliva, sal, pimienta, ajo en polvo y tu salsa favorita en un tazón, y añade las alitas hasta que estén bien cubiertas. Coloca las alitas en una bandeja para hornear y hornéalas durante 40-45 minutos, dándoles la vuelta a la mitad del tiempo para que se doren uniformemente. Sírvelas con más salsa y disfruta.

Para la preparación de alitas de pollo al horno de manera detallada, comienza seleccionando alitas de pollo frescas, que puedes comprar en la carnicería o en el supermercado. Asegúrate de lavarlas y secarlas bien con papel toalla para eliminar cualquier exceso de humedad, lo que ayudará a que queden más crujientes. En un tazón grande, vierte un par de cucharadas de aceite de oliva; esto no solo ayudará a que las especias se adhieran mejor a las alitas, sino que también les dará un buen color dorado al hornear.

Añade a la mezcla de aceite sal y pimienta al gusto, junto con otras especias que prefieras, como ajo en polvo, cebolla en polvo o pimentón. Si te gusta el picante, puedes incluir un poco de salsa picante o pimentón ahumado para darle un toque diferente. Mezcla bien hasta que todas las alitas estén cubiertas de manera uniforme con la mezcla.

Luego, coloca las alitas en una bandeja para hornear, preferiblemente sobre una rejilla, para permitir que el aire circule a su alrededor, lo cual ayudará a que queden más crujientes. Asegúrate de que estén bien espaciadas y no amontonadas, ya que esto también influye en la textura final. Hornéalas en el horno precalentado a 200 °C (400 °F) durante unos 40 a 45 minutos. Es recomendable voltearlas a la mitad del tiempo de cocción para que se doren de manera uniforme por ambos lados.

Cuando las alitas tengan un dorado atractivo y se despeguen fácilmente del hueso, estarán listas para sacarlas del horno. Déjalas reposar unos minutos antes de servir, esto permitirá que los jugos se asienten y las mantendrá jugosas. Puedes acompañarlas con más salsa, apio y zanahorias, o incluso con aderezo de queso azul para un verdadero festín. ¡Disfruta de tus alitas de pollo al horno!