Como hacer galletas suaves y esponjosas

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¿Alguna vez has querido sorprender a tus amigos o familiares con un delicioso postre casero, pero no sabías cómo lograr que tus galletas tuvieran esa textura suave y esponjosa que las hace irresistibles? Imagina una tarde tranquila en casa, el aroma de la vainilla llenando el aire, mientras preparas una tanda de galletas que no solo tienen un sabor exquisito, sino que también se derriten en la boca. En este artículo, te mostraremos cómo hacer galletas suaves y esponjosas que dejarán a todos pidiendo más.

Para hacer galletas suaves y esponjosas, utiliza mantequilla a temperatura ambiente, agrega más azúcar moreno que azúcar blanco, y no sobremezcles la masa.

Para lograr galletas suaves y esponjosas, comienza por reunir los ingredientes necesarios: mantequilla a temperatura ambiente, azúcares (blanco y moreno), huevos, extracto de vainilla, harina, bicarbonato de sodio y sal. La clave para una textura esponjosa radica en la combinación de estos ingredientes. Primero, bate la mantequilla con el azúcar moreno hasta que la mezcla esté suave y cremosa. Esto incorpora aire en la mezcla, lo que contribuye a la esponjosidad.

Asegúrate de utilizar una mayor proporción de azúcar moreno que de azúcar blanco, ya que el azúcar moreno aporta humedad y también ayuda a que las galletas sean más blandas. Agrega los huevos y el extracto de vainilla, y sigue batiendo hasta que todo esté bien combinado.

Después, tamiza la harina junto con el bicarbonato de sodio y la sal, e incorpóralo a la mezcla de mantequilla. Aquí es vital no sobremezclar; mezcla solo hasta que los ingredientes secos se hayan incorporado. Si la masa se mezcla en exceso, las galletas pueden volverse duras.

Por último, deja reposar la masa en el refrigerador durante al menos 30 minutos antes de hornear. Esto ayuda a que las galletas mantengan su forma y evita que se expandan demasiado en el horno. Precalienta el horno y hornea las galletas en porciones, asegurándote de no dejarlas demasiado tiempo; sacarlas cuando aún estén ligeramente doradas asegura que mantengan su suavidad. ¡Así de fácil tendrás unas galletas irresistiblemente suaves y esponjosas!

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