Como hacer kumis casero

En el mundo de las bebidas fermentadas, el kumis ha ido ganando popularidad gracias a su sabor único y sus beneficios para la salud. Imagina a alguien que busca una alternativa refrescante y probiótica para incluir en su dieta diaria, o quizás a un amante de las tradiciones que desea recrear una bebida típica de su herencia. Ya sea para impresionar a amigos en una reunión o simplemente para disfrutar de la satisfacción de hacer algo casero, la pregunta sobre cómo hacer kumis casero surge, revelando la curiosidad y el deseo de experimentar en la cocina.

Para hacer kumis casero, necesitarás leche (preferiblemente de cabra o vaca), un poco de azúcar, y algún tipo de iniciador como un yogurt natural o un cultivo de kumis. Simplemente mezcla la leche con el azúcar, añade el iniciador y deja fermentar a temperatura ambiente durante 24-48 horas. Luego, refrigera y ¡disfruta!

Para hacer kumis casero, comienza por reunir los siguientes ingredientes: un litro de leche, cinco cucharadas de azúcar y 100 gramos de yogurt natural o un cultivo de kumis que puedes encontrar en tiendas especializadas. Primero, calienta la leche en una olla a fuego medio, removiendo frecuentemente para evitar que se queme. Cuando la leche esté caliente (pero no hirviendo), retírala del fuego y deja que enfríe un poco. Añade el azúcar a la leche caliente y revuelve hasta que se disuelva completamente.

Una vez que la leche haya alcanzado una temperatura tibia (alrededor de 37-40 °C), incorpora el yogurt o el cultivo de kumis. Mezcla bien para asegurarte de que el iniciador esté uniformemente distribuido. Cubre el recipiente con un paño limpio o una tapa ventilada para permitir que la mezcla respire mientras fermenta. Coloca el recipiente en un lugar cálido y oscuro, como un armario o una despensa, y déjalo reposar durante 24 a 48 horas, dependiendo de la intensidad de sabor y acidez que desees obtener.

Después del tiempo de fermentación, verifica el sabor. Si estás satisfecho, mueve el kumis a la nevera para detener el proceso de fermentación. Puede servirlo frío y disfrutarlo solo o usarlo como base para batidos y recetas. Recuerda que el kumis se puede almacenar en el refrigerador durante aproximadamente una semana. ¡Disfruta de tu deliciosa y saludable bebida casera!