Como hacer membrillo casero
UncategorizedLa temporada de otoño trae consigo una abundantísima cosecha de frutas, y entre ellas se destaca el membrillo. Muchas personas que disfrutan de la cocina casera comienzan a preguntarse cómo hacer membrillo casero para aprovechar esta fruta y preparar postres deliciosos. Si tú también te has encontrado en esta situación, buscando la manera de transformar el membrillo en una dulce y exquisita conserva que encanta a grandes y pequeños, sigue leyendo para descubrir la receta completa que te llevará a disfrutar del sabor único del membrillo en tu hogar.
Para hacer membrillo casero, necesitarás membrillos, azúcar y agua. Cocina los membrillos pelados y cortados en trozos en agua hasta que estén blandos, luego añade el azúcar y cocina a fuego lento hasta que obtengas una consistencia de gelatina.
Para preparar membrillo casero, sigue estos pasos detallados:
1. Ingredientes Necesarios: Necesitarás 1 kg de membrillos, 800 g de azúcar y 1 litro de agua. Además, puedes añadir un poco de jugo de limón para realzar el sabor.
2. Preparación de los Membrillos: Lava bien los membrillos y pélalos. Corta la fruta en cuartos y quita las semillas.
3. Cocción Inicial: En una olla grande, coloca los trozos de membrillo y cúbrelos con agua. Lleva a ebullición y cocina a fuego medio hasta que los membrillos estén tiernos, aproximadamente 25-30 minutos.
4. Trituración: Una vez cocidos, escurre los membrillos y tritúralos con una batidora o prensa de alimentos hasta obtener un puré suave.
5. Adición de Azúcar: Regresa el puré a la olla y añade el azúcar. Cocina a fuego lento, revolviendo constantemente para evitar que se pegue, hasta que la mezcla espese y adquiera una consistencia similar a la de una gelatina. Este proceso puede tardar alrededor de 1 a 2 horas.
6. Envasado: Una vez que la mezcla esté lista, viértela en frascos de vidrio previamente esterilizados. Deja enfriar a temperatura ambiente antes de cerrar los frascos.
7. Conservación: Puedes almacenar tu membrillo casero en un lugar fresco y oscuro. Una vez abierto, guárdalo en el refrigerador.
Siguiendo estos pasos, podrás disfrutar de un delicioso membrillo casero, ideal para untar en tostadas, acompañar quesos o simplemente disfrutar solo. ¡Buen provecho!