Como se hace el pan

La cocina casera puede ser un mundo emocionante, especialmente cuando decides aventurarte a hacer tu propio pan. Imagina a alguien, quizás después de un largo día de trabajo, en busca de una actividad reconfortante y gratificante. Se siente inspirado por el delicioso aroma del pan recién horneado que ha visto en las redes sociales y se pregunta: «¿Cómo se hace el pan?» Este momento de curiosidad y creatividad es más común de lo que se piensa y puede ser el primer paso hacia la creación de un producto delicioso y acogedor en casa.

Para hacer pan, necesitas harina, agua, sal y levadura. Mezcla estos ingredientes, amasa la masa hasta que esté suave, déjala levar, forma el pan y hornea a 220°C durante unos 30 minutos.

Para hacer pan en casa, comienza reuniendo los ingredientes básicos: 500 gramos de harina de trigo, 300 ml de agua tibia, 10 gramos de sal y 7 gramos de levadura seca (o 25 gramos de levadura fresca). En un bol grande, mezcla la harina y la sal, asegurándote de que la sal no esté en contacto directo con la levadura, ya que puede inhibir su actividad. En otro recipiente, disuelve la levadura en el agua tibia y déjala reposar por unos minutos hasta que empiece a espumar. Luego, agrega la mezcla de levadura al bol con la harina y mezcla hasta formar una masa.

Amasa la masa en una superficie enharinada durante unos 10 minutos, hasta que esté suave y elástica. Coloca la masa en un bol ligeramente engrasado y cúbrela con un paño húmedo; déjala reposar en un lugar cálido durante 1 a 2 horas, o hasta que haya duplicado su tamaño. Una vez que haya levado, saca la masa del bol y golpea ligeramente para quitar el aire. Forma el pan según tu preferencia (puedes hacer un pan redondo o en barra) y colócalo en una bandeja de hornear. Deja que vuelva a levar durante 30-45 minutos.

Finalmente, precalienta el horno a 220°C (428°F) y hornea el pan durante 25-30 minutos, o hasta que suene hueco al golpear la parte inferior. Al sacarlo del horno, déjalo enfriar sobre una rejilla antes de cortarlo. Disfruta de tu pan casero con mantequilla, mermelada o simplemente solo, y siéntete orgulloso de tu creación culinaria.